miércoles, 26 de enero de 2011

MICRORRELATOS

UN DIA PERFECTO


Necesito un día perfecto. Nueve de la mañana reunión. Las cuentas no salen. Agacho la cabeza y miro al suelo. Mea culpa. Rabia. Once de la mañana discusión a viva voz. El tiene razón pero yo grito mas alto. Impotencia. Escapada hacia delante. Doce del mediodía charla con el gran jefe. Ultimatum. No hay mas oportunidades. Necesito desconectar. Llamada a Marta. Ella me entiende. Uno, dos, tres...tonos. No hay respuesta. Suspiro. Leo mi correo. Mail en rojo. Un nuevo fallo. Ya no hay tiempo. Estoy en el borde del precipicio. Cojo mi chaqueta. Me monto en mi coche sin ninguna dirección. Acelero. 80. Adelanto a un coche. 100. Zig zag.120.Carril de la derecha.140.No pienso. 160. Solo escapo. 180. Curva a la derecha. 200 Mi coche sale recto. 5 segundos en el aire e impacto. Saltan los airbags. No estoy muerto.  ¿Un día perfecto?

SOLUCIONES



Ella ya no era igual. Yo lo notaba. Sus ojos le delataban. Ya no me miraba como antes. Yo intentaba engañarme. Atrasar la noticia. Pero la carta ya estaba enviada. El día llego y ella me dijo las peores palabras. He conocido a otra persona. Ya no te quiero. Era el momento de retirarse. Soldado vencido vuelve a casa. Era el momento de llorar. De decir todo aquello a lo que no te atreviste. No había vuelta atras. Asumir los errores y volver a casa. Solo podía desaparecer. Siempre fui un tipo cobarde. Yo te quiero. Abro la ventana. Dudo unos segundos. Solo un instante. Es mi solución.


VIVIR


Trabajo. Esa era la palabra preferida de mi padre. Honradez. Esa era la base en la vida de mi madre. Con el sudor de mi frente he conseguido esto. Es el único recuerdo que me dejo mi abuelo. Esfuerzo marcaban con tinta roja mis profesores. Se un tipo modélico. Encuentra un buen trabajo. Casate. Comprate un casa grande. Un coche todavía mas grande. Ten hijos. A poder ser dos. Sigue el camino de baldosas amarillas. No pensar. Haz todo lo que hacen los demás. No le des mas vueltas. Es lo mejor.¿Y tanto sacrificio para que? Tengo un sobre entre las manos. Me dan el alta. No son buenas noticias. Los ojos tristes de Olivia me miran:“Lo intentaremos”.Intentar vivir. 

 BLANCO



Tengo ganas de escribir. Mi mente esta clara y lucida. Tengo cosas que contar. No hay nada que me moleste. Al fin encontre el momento adecuado. Soy Feliz. Lo tengo todo. Pero la pantalla sigue en blanco. Me levanto, recorro el pasillo. Me vuelvo a sentar. Algo me impide escribir. Quiero contar todo lo que me pasa. Tengo ideas nuevas. Pero el enemigo invisible sigue ahi. Esto no puede ser tan complicado. Escribe. Vamos escribe. Tu puedes. Lo has hecho antes. Ha llegado la hora. Lo necesitas. Te das animos. Golpeas tu frente con tus manos. Tus nudillos chocan contra la mesa. Estas a punto de empezar. Pero tu pagina sigue en blanco.Todo lo ves negro. Como la persona que escribió tu primer libro.

1 comentario:

  1. Hola Alberto,
    tus microrelatos tienen un ritmo frenético y deprimente a la vez.Condensas en pocas palabras muchas sensaciones angustiosas. A mí me ha gustado mucho "un día perfecto", es trepidante.
    Un saludo de Miguel.

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