Como en una película, un día
coges el coche, carretera perdida, conduces sin dirección, solo el cielo
ante ti y llegas a un pueblo costero con mar.
Dejas tu auto con las llaves puestas y el motor a ralenti. Nunca sabes
cuando alguien precisa escapar y cedes tu puerta abierta al destino a otra
persona que lo pueda necesitar. Desamarras tu barca, arrancas el motor y tomas
velocidad crucero hacia donde te dirige
el azar. Una vez pisas tierra firme, respiras aliviado. Tierra conocida. Notas
como las pulsaciones se revolucionan.
Tierra que no te fallara. La piel se eriza. Tierra que no pertenece a
nadie. Tus ojos se vuelven brillantes.
Te quedas mirando las olas y te dices: “¡Este es mi lugar!”.
No regresare. No vengáis a por mí. Os lo juro. No regresare. Respiras mas
fuerte aún. Suspiras. Coges aire de nuevo y gritas: “Os lo juro, NO REGRESARE.
ESTE ES MI LUGAR”
Mi sitio privado. Coto reservado. Libre de cazadores de
sueños. Libre de cazadores con escopetas que matan palomas mensajeras que
llevan historias de amor. Libre de gente tóxica. Libre de gente que me diga que algo no se puede hacer. Libre de
pepitos grillos que queman los sueños. La vida no es como las películas. Los
lobos nunca trabajaran para el circo. Ya lo sé. Pero esta es mi película y yo
soy el protagonista. Esta Isla tiene
todos los ingredientes para no ser real. Para ser lo que siempre me gusto.
Truman. La isla de los animales. Truman es la historia de aquel can que te hizo
llorar en una butaca al fondo de aquel solitario cine. Los animales son
personas. Rectifico hay animales que quiero mas que a muchas personas. Y hay
mucho animales mas dignos que cualquier persona que seguramente habría que
llamar animal. Esta isla es empatía. No confundáis con simpatía. La empatía
alimenta la conexión, la simpatía lleva a la desconexión. La empatía es cuando
Javier Camara escucha y entiende a Ricardo Darin sin decir una palabra. Sin
emitir juicios. Con extrema sensibilidad. Solo con su presencia. Conociendo que
cuando uno esta ahí abajo solo necesita tres palabras: “No estas solo”.
La isla de la amistad. La de apóyate sobre mi hombro. La de
algún día tienen que ganar los de abajo. Los perdedores. Con tres heridas. La
de la vida. La de la muerte. La del amor. Así se presenta. Como Miguel
Hernández. Porque alguna vez tienen que ganar los buenos. Los que sujetan el
castillo de naipes en el que vivimos. Los que sufren. Los que las pasan putas.
Los perdedores saldrán de las cunetas. Los nuevos ganadores. Vuestro ultimo
grito sera el más sincero. Vuestro ultimo grito sera mi primero. Por fin
perderemos el miedo. Miedo a nada. Miedo a no tener miedo. Las cicatrices se
aclaran y las heridas se vuelven piel. Solo queda caminar hacia la luz. Los
momentos oscuros ya no existen. Las nubes negras se han deshecho. Los demonios
no son tan temibles.
Truman es la isla de las despedidas. Despedidas inesperadas.
Despedidas que no deseamos. Despedidas que no están fijadas en el calendario.
Es el sitio en el que nunca te hará falta el apuntador del teatro en los momentos
que te quedas en silencio. Es la isla en la que no decir nada será una ultima
respuesta acertada, porque tu y yo sabemos que lo tenemos todo dicho. Siempre
me gustaron los mimos. Solo nos queda reír. Solo nos queda mirarnos a los ojos
y despedirnos sin palabras. Solo nos queda recordar lo que vivimos. Solo nos
queda olvidar la pena que dará no verte
sonreír cuando tu no estés a mi lado.
Truman significa nuestro sitio secreto. Nuestro lugar
favorito. Nuestro sitio para nosotros. Nuestra archipiélago sin camino de
retorno. Nuestra isla bonita. Un sitio para ser feliz. Un buen lugar para que
Peter pan se deje barba. Todavía nos queda tiempo. Pidamos una prorroga al
destino. La guadaña ha pasado cerca, pero las heridas no son mortales. Soldado
herido desea volver a casa a tomar una ultima cerveza. Esta no sera nuestro
ultima conversación. Nos quedan muchas discusiones. Nos queda muchas
carcajadas. Nos quedan momentos para estar juntos.
Juntos pediremos deseos a estrellas de mar fugaces.
Juntos mandaremos canciones en botellas de ron vacías para
que las sirenas canten a los piratas.
Juntos evitaremos los colmillos del cocodrilo.
Juntos miraremos a la luna.
Juntos vacilaremos al capitán Garfio.
Juntos bailaremos con Wendy..
Juntos siempre seremos PETERPANES.
Juntos nunca moriremos.
Juntos en la ISLA TRUMAN.
JUNTOS.